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jueves, 10 de julio de 2014
Articulo: The Legend of Zelda
Remontemonos por un momento a 1998. Por aquel entonces salio al mercado The Legend Of Zelda: Ocarina of Time. Junto a Mario 64, era un concepto que rompia con su propia saga para adaptarse a los gustos y a los consumidores masivos del momento, alejandose tanto a nivel de perspectiva grafica como conceptual. OOT se le encumbro rapidamente en una maquina con un catalogo muy limitado, con una campaña de marketing que lo promocionaba como el mejor de la historia incluso antes de salir, ademas de haber mucha gente que llegaba con los ojos virgenes a los videojuegos.
Hoy vamos a recordar el origen de la saga, el verdaderamente mitico e influyente The Legend Of Zelda que si marco escuela en su momento, siendo revolucionario, sentando la base de todas las aventuras y juegos complejos de consola posteriores.
Al contrario que los actuales, que son aventuras con cierto toque de combate, The Legend of Zelda era un arcade con cierto toque aventura-rpg. No tenia tiempo limite o "credits", pero mantenia mucha estructura arcade. Tenias vidas ilimitadas y podias guardar debido al toque aventurero del juego, pero siempre empezabas desde el mismo sitio al ver el game over y el combate podria estar extraido de qualquier buen juego de la epoca.
Desde el primer momento ya entra por los ojos, su presentacion es magica y la melodia que suena nos introduce enseguida en la ambientacion del juego. Al contrario que en los Zelda modernos, en el original no existian ningun tipo de pueblos, ni sub-historias, eras Link en una tierra infestada y tenias todo en contra. Empezabas desarmado y tenias que buscar tu espada. Al empezar a moverte por el mapeado, impacta enormemente darse cuenta de la terrible complejidad del combate y normalmente te veras abrumado por los enemigos rapidamente, y durante el juego llegaras a morir cientos de veces. Sera primordial mantener el haz de la espada siempre que podamos porque sin el sera realmente muy complicado. Quizas algunos no conozcan el Haz, porque debisteis empezar con OOT, era una especie de extension magica de la espada que atacaba a distancia, con la mitad de poder, y que podias usar si mantenias tus corazones intactos. Como podeis ver, se necesitaba perfeccionamiento para poder usarlo, asi que se premiava a la gente que sabia jugar bien.
Para alguien acostumbrado a las facilidades de la saga moderna, The Legend Of Zelda debe ser un ejercicio de masoquismo, ya que presenta una jugabilidad totalmente directa. Nada de fijacion de objetivo, nada de hadas que te dicen como derrotar a los enemigos, nada de tutoriales, nada de que un bicho te quite medio corazoncito, nada de buhos que te ayudan gratuitamente, nada de poquisimos enemigos, nada de convertir el combate en un simple puzzle mas donde no prima en ningun momento la habilidad del jugador, etc.
Es curioso que un elemento por el que se conocen los Zelda, es la "libertad". Cuando las entregas modernas son las mas terriblemente lineales, y mas si las comparamos con el primero.
Solo dire que desde el primer momento puedes acceder a un mapeado enorme y que si buscas puedes encontrar la ultima mazmorra del juego, tan solo empezar. Eso es libertad.
La exploracion en si misma es otra de las grandes virtudes del juego, es una autentica delicia... montones de pantallas y caminos retorcidos plagados de enemigos y secretos. Donde se debe usar la memoria para memorizar las cosas porque no hay iconos que te indiquen donde estan...da la verdadera sensacion de estar perdido y de ser un heroe en un mundo hostil. No de un niño que juega a ser mayor con una espada, como en cierto juego que yo me se. El primer Zelda es un ejemplo claro de como la dificultad puede marcar lo que sientes con un videojuego.
La exploracion consiste en ir buscando por el enorme mapeado cuevas y lugares secretos, buscando sabios que dan pistas o simplemente nuevas armas, objetos, o tenderos. Realmente puede ser muy retorcido encontrarlos ya que debes deambular durante horas hasta que aprendes a dominar el combate y el mapeado y puedes ir con cierta tranquilidad, empujando y usando bombas en todos los lugares que veas sospechosos... solucionando los laberintos y mirando cada detalle extraño. La unica ayuda del juego son una serie de pistas misteriosas que te van dando de tanto en tanto, siempre y cuando encuentres los lugares secretos. Y encontrar algunos templos puede llevarte la vida, y como en las mejores aventuras graficas, puede que te encalles realmente de por vida.
¿Y respecto a las mazmorras? No son como las modernas, que son solo puzzles gigantes, sino que son laberintos infestados de enemigos y con ciertos puzzles mecanicos muy complicados y que llevan hasta el enemigo final de turno, que hasta el mas facil de ellos hace sombra al peor Ganondorf de OOT. Tendremos unos cuantos objetos a usar como en todo Zelda, y se avanza usando llaves y abriendo puertas cumpliendo pequeños objetivos. La calidad general de las mazmorras es alta en su estilo, y son tan terriblemente adictivas como el resto del juego.
Resumiendo y en conjunto, The Legend Of Zelda es una obra maestra atemporal del videojuego. Conjuga a la perfeccion un apartado jugable incuestionable y una ambientacion notable que ha marcado a mucha gente. Es una autentica joya olvidada.
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